jueves, 19 de marzo de 2009

NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO.......

NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO…………


No todo lo que brilla es oro, y menos en nuestra cultura local, tan distanciada de la gente, como de los propios actores. En estos casos, cultores de la Artes Visuales, léase pintores particularmente.
La primera reflexión es con respecto a los reales alcances de la política cultural imperante, ¿Cuánto se debería hacer, o realmente cuanto se puede hacer. ?

Miremos alrededor nuestra moderna polis y veremos como ha surgido un remakes criollo, del muralismo, tan de moda en los años 70, fruto de la contingencia y la sociedad en ebullición.


Esta promisoria situación podría hacer pensar que basta hacer más de lo mismo para seguir avanzando en materias culturales. Creemos que ello no es así. Por cierto, hay una nueva forma de relación entre creadores, sociedad y cultura –que está delineada en el capítulo relativo a los principios de la política cultural de este documento- que debe ser preservada. Igualmente, hay un conjunto de herramientas –tales como los fondos concursables- que pueden y deben ser fortalecidas y potenciadas. Sin embargo, estas importantes medidas ya no bastan, pues ellas mismas han cambiado nuestra actual circunstancia y han transformado completamente nuestras propias y legítimas necesidades culturales.

Concluiremos de manera preliminar, que no por mucho abarcar, se crece, ni menos se
avanza, falta mayor debate y menos protagonismo de nuestros agentes locales, que se pierden en rencillas surrealistas y con tan poca profundidad., obviamente de campo.

Como segundo caso, citaré un proyecto personal , que daba cuenta de la organización de la primera Bienal de Arte-Postal, Latinoamericano, con sede en nuestra ciudad, donde el tema de las obras, era nuestro hermoso desierto de Atacama, sin embargo fue evaluado mal por su escaso aporte a la escena regional.


Esta promisoria situación podría hacer pensar que basta hacer más de lo mismo para seguir avanzando en materias culturales. Creemos que ello no es así. Por cierto, hay una nueva forma de relación entre creadores, sociedad y cultura –que está delineada en el capítulo relativo a los principios de la política cultural de este documento- que debe ser preservada. Igualmente, hay un conjunto de herramientas –tales como los fondos concursables- que pueden y deben ser fortalecidas y potenciadas. Sin embargo, estas importantes medidas ya no bastan, pues ellas mismas han cambiado nuestra actual circunstancia y han transformado completamente nuestras propias y legítimas necesidades culturales.

Salvador Lauriani O. marzo 2009

miércoles, 11 de marzo de 2009

"aquí no es la expo."

“Aquí no es la Expo”



Anggie González
Biblioteca Viva,
Mall Plaza.


El arte y las intervenciones digitales son conceptos bastante debatidos en los círculos artísticos y rechazados con frecuencia por algunos puristas que lo catalogan más como una habilidad técnica que una manifestación artística.
La eterna dicotomía, entre el discurso, el soporte y la obra.
Pero esta actitud proviene de un completo desconocimiento del arte computarizado, del sensacionalismo de los medios y la atracción popular sobre atractivas creaciones automatizadas ejecutadas por programas de computadoras procesando ecuaciones matemáticas. Ciertamente que en esos casos el artista sería el programador autor de los algoritmos que elaboran los diseños y estaríamos quizá alabando sin razón si llamamos de técnico al usuario que introduce los valores usados por las ecuaciones de esos programas para producir los diseños finales.Pero existe otra forma de arte digital. Un arte humano, expresión de sensaciones, ideas, búsquedas personales, visiones en forma gráfica y expresada usando el computador como herramienta del mismo modo que durante siglos se ha usado el lienzo, la pared o la piedra.
La mecánica de intervención de la obra, acción de desplazamiento, debe sus primeros orígenes al discurso cubista, que con sus collages y decollages, agregó elementos tipográficos, pletóricos de simbolismo y poesía.

La propuesta de la joven creadora Anggie González, nos presente 13 gráficas intervenidas, donde el dibujo y el píxel, se funden construyendo y reconstruyendo imágenes de un paisaje interior, imaginería con claras
influencias del Cómics.

No deja indiferente el discurso de la artista, que propone una renovación de los lenguajes plásticos y cuestiona el sistema cultural local, por lo cerrado y
hermético.

Del montaje de la exposición, se puede concluir que el camino recién se está iniciando y que como el aprendiz bajo el sol, falta mucho por recorrer.

Sin duda un aporte a nuestra plástica regional, tan en deuda en el último tiempo, con atrevimiento a nuevos soportes, en pleno siglo XXI.

SALVADOR LAURIANI OLIVARES

MARZO 2009